viernes, 22 de enero de 2010

Continúa el culebrón Paneta-Pota

El Juzgado número 2 de Ibi ha admitido a trámite la denuncia presentada el pasado verano por la dirección del PP de Castalla contra el alcalde de esta misma localidad, José Luis Prats, miembro también del PP. En la querella se acusaba a Prats de haber gestionado cerca de 250 afiliaciones a cambio de licencias de obras, y casí conseguir suficientes apoyos para lograr la presidencia local del partido. La denuncia también implicaba al alcalde en un presunto delito de apropiación indebida, dado que la agrupación local del PP no ha recibido los más de 2.000 euros de las cuotas que deberían haber aportado esos nuevos militantes.

Es preciso señalar que la querella estaba firmada, entre otros, por el ex alcalde y presidente local del PP, Juan Rico, que fue reelegido para el mandato en una asamblea en la que no pudieron votar los nuevos afiliados, lo que provocó una impugnación por parte del alcaldes Prats a instancias superiores del partido (a Valencia, porque es también muy amigo de Camps).

Por supuesto, esta historia tiene su continuación en los juzgados ya que a nivel político, el alcalde denunciado se niega a dar explicaciones de sus supuestas fechorías (cohecho y apropiación indebida) y carga con todas sus malas artes y la de la concejala McKenzie contra la oposición, sobre todo contra la portavoz socialista Maite Gimeno, incluso acusándola de xenófoba (está visto que Castalla Internacional es intocable para algunos).

El problema para Castalla es que todos estos líos están paralizando la ya escasa trayectoria del consistorio popular, es decir, que preocupados por salvarse de la quema de denuncias de unos a otros, dividido como está por la mitad el grupo popular, nadie hace nada ni se atreve a hacer, por supuesto. Todos quietos, que las tortas pueden venir de cualquier lado.

¡Qué lejanos quedan los días en que el recién elegido alcalde Prats tributaba el mayor de los homenajes al ex-alcalde Rico! Fanfarrias y oropeles, personajes excelsos como el Presidente de la Diputación, Sr. Ripoll (que no ya dará un euro a este pueblo hasta que Paneta no caiga), y todo retransmitido por TV con todo lujo de detalles (y en los plenos no se permite, ay señor) y muchas, muchas fotografías en el Crónica de Castalla, faltaría más.

Y ahora se acusan ambos alcaldes de trapicheos y chanchullos, en el ayuntamiento y en el partido. Ejemplarizante. ¿Y qué hace la gente de Castalla? Como siempre, se'n fot i calla.


lunes, 11 de enero de 2010

Sobre los presupuestos del Ayuntamiento de Castalla



A finales del mes pasado hubo un pleno para aprobar los presupuestos del Ayuntamiento de Castalla, No hace falta decir que este pleno es el que se considera más importante del año, ya que ahí se trata de ver qué dinero hace falta, tanto para los gastos de personal y gastos corrientes, como las inversiones y actuaciones de otro tipo.

Hemos recibido una nota del PSOE de Castalla, que podéis leer pinchando el enlace, donde explican su voto en contra a dichos presupuestos. Antes de nada, agradecer a esta formación política que nos haga llegar sus notas de prensa, ya que el resto de partidos de la localidad parecen ignorarnos.

Como tampoco los presupuestos es posible conocerlos vía Internet, ya que la web del Ayuntamiento está desfasada más de una año (¡viva la Administración electrónica y la transparencia ciudadana!), no podemos opinar por nosotros mismos. Según la nota del PSOE, los Presupuestos no responden a la actual situación de crisis, no contienen el gasto en el terreno de personal sino al contrario (no hay bajada de sueldo del alcalde ni de los concejales, como sí ha habido en otras poblaciones e incluso se ha contratado a más funcionarios), se reducen las inversiones un 75% pese a aumentar los impuestos que nos recauda a todos los castallenses (no hay nada presupuestado para el Casco Antiguo), destacando barbaridades como asignar únicamente 2.000 euros al fomento del empleo mientras se piensan gastar 150.000 € en protocolo y propaganda, así como dejar a deber medio millón de euros a las empresas que le trabajan al Ayuntamiento...


En fin, nada nuevo bajo el sol (y en estos días, la nieve). Y tal como está de peleado el grupo popular, bastante hará el alcalde en vigilar su espalda de cuchilladas traperas, bien provengan de sus mismos compañeros de partido en Castalla, bien provengan de José Joaquín Ripoll, presidente de la Diputación.

Tiempo habrá de hablar de la crisis interna del PP de Castalla. Lo malo es que si no saben gobernarse ellos, cómo van a gobernar el pueblo.

sábado, 2 de enero de 2010

Esperem que enguany tinguem un any profitós, amb menys atur, més producció industrial, menys "política basura" des de l'Ajuntament de Castalla per part de l'alcalde i el destrossat grup popular i més polítiques constructives entre tots, que la situació no és bona i cal treballar units.